Varias estaciones de esquí de los Alpes y Pirineos aplazarán su apertura prevista hasta finales de noviembre por falta de nieve suficiente para funcionar correctamente, han indicado sus operadores.
Este es el caso particular de Val Thorens (Saboya), que tenía previsto lanzar el sábado su temporada de invierno y pospuso una semana la apertura, como consecuencia de “una climatología particularmente suave en otoño”.
“Actualmente, la capa de nieve en altura es satisfactoria pero no permite un regreso directo al resort”, explicó en un comunicado de prensa esta semana.
La misma decisión en Val d’Isère y en el balneario vecino de Tignes (Saboya), que también pospuso su apertura una semana, del 26 de noviembre al 3 de diciembre, por las mismas razones. Tignes se conformará con abrir una pista sobre su glaciar el sábado.
Las temperaturas muy suaves han impedido hasta ahora el funcionamiento de los cañones de nieve.
“Había muy poca nieve (pero) viene, eso es todo. El frío también, así que no se preocupen”, dijo el viernes a la AFP Olivier Simonin, gerente general de Val d’Isère Téléphériques.
“Es una decisión sabia y de sentido común ofrecer productos de calidad impecable a nuestros clientes”, subrayó.
Eventualmente, el resort planea “ajustar” la fecha de inicio de la temporada para adaptarse al cambio climático, agregó, y señaló que “hemos estado hablando de esto durante 2 o 3 años”.
En los Pirineos franceses, la falta de nieve también retrasará el inicio de la temporada de esquí, dice Michel Poudade, presidente de “Neiges catalanes”, un grupo de estaciones de esquí de los Pirineos Orientales.
“Vamos a retrasar alrededor de una semana para las estaciones que anunciaron su apertura a fines de noviembre. Y para las estaciones que planearon abrir a principios de diciembre, ya veremos”, dijo.
El clima no preocupa al electo, que también es alcalde de la estación de Angles: “Anuncian frío para la próxima semana y nieve este fin de semana, por lo que todo puede cambiar muy rápido”. Y las estaciones tienen “suficiente agua para hacer nieve artificial” en reserva, estima.
Por el lado andorrano, está previsto que las estaciones de esquí de Grandvalira, Ordino Arcalís y Pal Arinsal abran a partir del 2 de diciembre si las condiciones meteorológicas lo permiten, aunque no se descarta que las pistas puedan abrir antes.
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