Nuevo biomarcador en sangre podría facilitar detección temprana del cáncer de pulmón
La tasa de mortalidad del cáncer de pulmón sigue siendo la más alta en hombres y mujeres, siendo una de las principales causas de muertes relacionadas con el cáncer en todo el mundo. Sin embargo, un nuevo estudio observacional llamado ‘Moon Shot’ ha desarrollado un biomarcador en sangre que podría mejorar los resultados de los programas de detección temprana de esta enfermedad.
El estudio ‘Moon Shot’ ha reclutado a 10.000 voluntarios, incluyendo participantes de España, para realizar pruebas de detección temprana, como espirometría, TAC de tórax y análisis de sangre. Los investigadores han descubierto que cuatro proteínas específicas en la sangre pueden identificar a individuos con mayor riesgo de desarrollar cáncer de pulmón. Este biomarcador permitiría identificar a personas en riesgo y facilitar su acceso al programa de detección mediante TAC de baja radiación.
Actualmente, cada año se realiza un cribado mediante TAC de baja radiación a personas fumadoras o exfumadoras de entre 50 y 80 años. Sin embargo, se estima que el 80% de los casos de cáncer de pulmón podrían ser curables si se detectan a tiempo. Por lo tanto, la detección temprana a través de biomarcadores en sangre podría ser una herramienta vital para mejorar la supervivencia de los pacientes.
Este nuevo biomarcador en sangre desarrollado en el estudio ‘Moon Shot’ estará disponible próximamente, y se espera que ayude a mejorar los resultados de los programas de detección. Está comprobado que los programas de cribado anuales mediante TAC de baja radiación reducen la mortalidad por cáncer de pulmón en un 20%. Sin embargo, aún se necesitan nuevos criterios poblacionales y biomarcadores en sangre para seguir mejorando los resultados.
El cáncer de pulmón es una enfermedad grave y mortal, pero con los avances en la detección temprana y el desarrollo de nuevos biomarcadores, hay esperanza en reducir su impacto. España ha demostrado su compromiso al participar en este estudio mundial de cinco años y ha ayudado a crear el primer protocolo de detección precoz de esta enfermedad. Se espera que este nuevo biomarcador pronto esté disponible para ayudar a identificar a las personas en riesgo y mejorar la lucha contra el cáncer de pulmón.
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