Los incendios forestales son los más grandes en diez años en Brasil, casi la mitad de ellos en la Amazonía, un aumento anual récord del 12,7%, según estadísticas publicadas el domingo por el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe).
Ya se han producido 103.000 incendios en la Amazonía brasileña, un aumento anual de casi el 16% de un total de 222.798 en todo el territorio brasileño el año pasado, destaca un informe del INPE que utiliza imágenes satelitales para rastrear incendios forestales y deforestación.
Esta cifra también incluye más de 22.000 incendios en el Pantanal, ubicado en el sur de la Amazonía, santuario de biodiversidad y la zona húmeda más grande del planeta, devastado en casi una cuarta parte de la superficie con un aumento del 120% de incendios en 2020.
La Amazonía, considerada vital para combatir el calentamiento global y con el 62% de la superficie ubicada en Brasil, y el Pantanal son los dos ecosistemas más preciados del mundo.
La situación solo ha empeorado desde la elección en 2019 del presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro, a favor de abrir áreas protegidas y territorios indígenas a la minería y la agricultura.
Solo en agosto de 2020, la deforestación alcanzó una superficie mayor que la de Jamaica, un récord de 12 años, según el INPE.
Los incendios son iniciados principalmente por personas que buscan expandir las áreas de pasto y cultivo, dicen los expertos.
La deforestación en la Amazonía entre 2000 y 2018 alcanzó los 513.016 km2, un área tan grande como España, amputando el bosque tropical más grande del mundo en un 8%, informó la Red de Información Social Amazónica el 8 de diciembre. (Raisg), un colectivo de investigadores y ONG.
La Amazonía cubre nueve países (Brasil, Colombia, Perú, Bolivia, Ecuador, Venezuela, Surinam, Guyana y Guayana Francesa), con alrededor de 47 millones de habitantes, incluidas muchas comunidades indígenas.
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